Acabamos esta semana partida en dos con una artistaza llamada Sarah Jane. Ilustradora infantil y mamá de tres hijos, tiene la fabulosa habilidad de crear mundos imaginarios que hacen las delicias de grandes y pequeños, estampándolas en hermosas telas, láminas, vajillas y un sin fin de artículos más. Pero lo que más me gusta de esta ilustradora son los ojos con los que mira a la vida que la rodea.
«Creo en los niños. Creo en la fantasía. Creo en los sueños. Creo en el fondo bueno de las personas. Yo creo en los viajes al extranjero – por barco o por la imaginación. Yo creo en la inocencia de la infancia. Creo en los cuentos antes de dormir. Creo en Dios. Creo que hacer cosquillas puede resolver problemas. Creo en probar comida nueva que no sé que me gusta aún. Creo que hay conexiones mágicas entre las personas. Creo en la deambulación. Creo que los animales pueden hablar. Yo creo que el color te puede hacer feliz. Yo creo en un mundo hermoso. Y creo que al igual que Harold y el lápiz color morado, que tú puedes dibujar tu vida»