Hace un par de semanas pude disfrutar de una despedida de soltera a lo grande y de relax. En un spa de esos en los que te olvidas donde estás y donde dejaste olvidado el dolor de espalda. No estuvo mal, no señor.
Pero al ver todo lo que podía haber preparado para esta quedada de solteras y casadas me he quedado con las ganas (más aún) de repetirlo.
Chicas, esto sí que es prepararse en condiciones… hasta con invitaciones para la fiesta… Ay, ¿por qué no se me ocurriría antes? Es que en casa del herrero… ya se sabe.
Estas niñas sí que se lo montaron bien, con sus cestas de belleza con sales de baño, jabones, agua para estar hidratadas…
Sus aperitivos…
Y nada de ponerse las zapatillas standart… ¡hay que estar monas!
Al menos, pensando en positivo, para la próxima ya sabremos como mejorar nuestro aspecto para tener una estampa de recuerdo más favorecedora.
Aquí os dejo unas imágenes-tutorial y feliz fin de semana, con spa o sin el 🙂