La lluvia, esta Semana Santa, a diferencia de otras familias, no nos ha fastidiado ninguna excursión, ni chafado ningún viaje porque cuando llega esta fecha del calendario lo que más nos gusta en casa es pasear por Córdoba (y también Sevilla) para disfrutar de la ciudad y de sus hermandades y sólo miramos al cielo para que nos confirme si una cofradía u otra tendrán oportunidad de realizar su Estación de Penitencia.
Es nuestra forma de entender la vida. Somos cofrades desde siempre, aunque a alguien le suene extraño, y Rubén y Sofía ya son la quinta generación de cofrades llenando de orgullo a sus abuelos y a sus papás.
Estos días, con lluvia o sin ella hemos salido, andurreado entre sillita, cochecito, tacones y hasta mantilla. Hemos disfrutado de la compañía de nuestros amigos, echado alguna siestecita de más en la calle e incluso nos hemos vestido de nazarenos sin poder salir de la iglesia para realizar nuestra manifestación de fe. Pero ante todo, me lo he pasado pipa viendo lo bien que estaba Rubén entre todo este jaleo, viendo como se repetía la misma estampa de hace dos años ahora con Sofía, saludando a todo nazareno que pasaba por delante y descubriendo la nueva pasión de Rubén por la fotografia imitando a la pesada de la cámara de fotos, su mamá.
5 comentarios
Que imágenes más entrañables. Se nota que lo pasásteis bien. un saludo ♥
Gracias, Marite 🙂 Lo pasamos fenomenal a pesar de tener sólo un par de días sin lluvia. ¡Feliz fin de semana!
Te escribo desde Formosa, Argentina. Todos los dias espero con muchas ganas ingresar al blog, me gusta y ayuda mucho. Tus hijitos cada dia mas preciosos!!! Que Dios bendiga a esta maravillosa familia.
Graciela, muchas gracias. Me produce mucha alegría leerte y saber que te ayudo aunque sea un poco. Todo lo mejor también para ti 🙂 Un besote
enhorabuena por tu blog, como me gusta tanto te he entregado un premio BEST BLOG AWARDS, puedes verlo en mi blog<br />https://signandoenlacocina.wordpress.com/<br /><br />ENHORABUENAAAAA<br />Gema Alarcón